martes, 5 de febrero de 2008

LOS TAREFEROS
O la memoria musical misionera de los años 70

La década del 70 fue para los argentinos una época signada por contrastes ideológicos: la violencia política y la inestabilidad institucional. Esta realidad sumergió al país en una permanente crisis que en el campo cultural encontró las respuestas más interesantes y constructivas.
En esos años el centralismo porteño acrecentó su dominio como difusor de la cultura, en complicidad con las provincias que proyectaban sus referentes artísticos más destacados y, en el ámbito musical, los productores discográficos consolidaron un proyecto de “regionalización” del folclore. En el litoral la forma musical elegida fue el chamamé, originario de Corrientes; por esta razón los sellos discográficos desarrollaron un inteligente trabajo de difusión de este género. Sin embargo, en Misiones, la gente comprometida con la identidad cultural bregaba por un espacio musical y poético propio.
En ese contexto cultural Misiones alumbró un grupo musical de música nativa, LOS TAREFEROS, quienes, desde una propuesta absolutamente “misionerista”, enfrentándose a las corporaciones, supieron cosechar, a partir de un inteligente y generoso repertorio, el más notable reconocimiento popular de toda esa década.
El conjunto debutó en el festival del litoral de Posadas en octubre de 1970, alcanzando una destacada proyección provincial y nacional. Por razones de salud del líder del grupo, Amador “Pepe” Novoa, en 1975 dejaron de actuar profesionalmente; sin embargo lograron grabar su tercer LP en 1979.

El sonido “subversivo” de Los Tareferos
Apoyados en los ritmos locales, principalmente galopa y chotis, el grupo mostraba un “sonido propio y novedoso”, producto de una combinación de instrumentos diferente de cuanto se escucha por esos años. Ejercieron la audacia de incorporar al folclore instrumentos electrónicos, tales como órgano y guitarra eléctrica, combinándolos magistralmente entre sí y, en algunos temas, con instrumentos más tradicionales como el arpa y la guitarra criolla. Esta innovadora combinación le otorga al grupo una destacada singularidad que se proyecta hasta el presente.

Amador Novoa (1929-1985)
Vivió en Misiones desde los 2 años. Aquí arraigó su existencia, estudió, formó su familia (Carmen, su esposa, Cotita y Alejandro, sus hijos), ejerciendo su ocupación como despachante de aduana y como músico vocacional tocaba su acordeón en donde se lo permitían, contrariando la voluntad de sus padres, quienes no propiciaban su inclinación artística. Escribió sus canciones apoyado en el amor por Misiones, comprometido con su realidad social, histórica y etnográfica y consiguió traducir artísticamente la convicción ideológica de trabajar por la música misiones. Se reconoce como Correntino orgulloso de su raíz (grabó varias canciones en ritmo de chamamé) pero expone claramente los rasgos musicales que nos distinguen y a la vez nos integran a la región.
Supo ser generoso e intuitivo a la hora de elegir sus compañeros de ruta y las canciones de su repertorio. Ese comportamiento lo llevó a rodearse de elementos artísticos de gran talento y vocación cultural y a reunir las mejores canciones del repertorio misionero.
Era conciente de sus limitaciones como instrumentista pero supo darle a su órgano una personalidad única, con gran prolijidad y simplicidad en la ejecución.

Las canciones de Novoa
Las melodías de Novoa son simples y sencillas, pero dejan traslucir nuestros paisajes. “Galopa de los pájaros” y “Rincón de Quiroga”, entre otros tantos chotis, pintan los colores y las formas de la selva misionera. Sus recursos armónicos son elementales, estética que responde a las demandas del momento y del mercado discográfico que bien conocía Pepe.
Los contenidos poéticos de sus canciones destacan su amor por la tierra misionera, sus paisajes y su gente. Logra traducir en sonidos y palabras simples su clara convicción localista del arte. Descriptiva y explícita, su poesía se refiere especialmente al paisaje y se enrola en los movimientos nativos de las provincias de la época.
Destacamos la decidida definición de Misiones como “Hija India de la Patria”, idea que se fortalece en la galopa “Si yo fuera escultor”, obras que le otorgan un lugar preponderante a las comunidades originarias que habitan la provincia. También señalamos claro y definido perfil artístico localista, traducido en letras que nombran en canciones nuestros pueblos, picadas, parajes y referencias turísticas importantes.

Miguel ViarengoGuitarrista, autor, compositor. Fue fundador y mentor del grupo y estuvo junto a Novoa hasta el final. Su conocimiento musical y sus convicciones culturales le otorgaron un prestigio artístico deseable y numerosos reconocimientos. En LOS TAREFEROS encontró el espacio ideal y en Novoa al socio perfecto: basta escuchar el interesante equilibrio melódico y armónico de órgano y guitarra que logran en sus grabaciones para constatar esta aseveración. Falleció en Posadas en 2004.

Justo Benítez (Guitarra base)


Jorge “Cholo” Todero (Solista del LP “De Misiones Somos”)
Cantor popular de notable carisma y fuerza interpretativa. Su singular timbre de voz, con un carraspeo casi disfónico, presenta, sin embargo, gran potencia y poder de comunicación. Conocedor intuitivo de la profesión y de las canciones que interpretaba, le imprimió una indiscutible jerarquía a las obras de Novoa y Ramón Ayala y Viarengo.

Alberto “Tucho” González (Solista del LP “Misiones canta al Mundo)
La incorporación de Tucho fue otro gran acierto de Novoa. Este exquisito cantante trajo al grupo su equilibrada técnica y las canciones de Alcibíades Alarcón, notable compositor, amado por el pueblo, aún sin haber grabado nunca sus obras.
Tucho, actualmente, es uno de los cantantes de la orquesta folklórica de la provincia.

Gloria María (Solista del último LP)
Fue incorporada al grupo siendo una niña. Sin embargo, supo llevar con alegría la pesada carga de trabajar con artistas reconocidos. Si bien las grabaciones dejan entrever cierta inexperiencia, le dan a la obra de Novoa la sutileza femenina que le hacía falta. Su dúo con Vicente Olguín no resulta convincente y no deja de ser la sumatoria de dos solistas pues caen en fórmulas vocales previsibles. No tuvo vida artística después de su participación en este grupo.

Vicente Olguín (Solista del último LP)
Su trabajo resulta prolijo desde lo técnico pero no alcanza a reemplazar la ausencia de Cholo y Tucho, dos cantantes de gran personalidad y estilo. Las canciones que interpretan están en polos estéticos muy distintos: Siesta en el monte, magistral obra de Ayala y Ojeda, por un lado y el lamentable chotis La Galación, mucho más simple y con escaso vuelo poético y musical en el otro extremo.
Vicente, actualmente, es otro de los cantantes de la orquesta folklórica de la provincia.

Hugo Monzón (bajista en el último LP)
Es un músico de larga trayectoria musical en Misiones, desenvolviéndose principalmente en el campo de las denominadas "orquestas de baile". Integró durante muchos años el grupo musical "Los Diablos", de L.N. Alem, entre otras reconocidas agrupaciones dedicadas a la música bailantera.

8 comentarios:

Anónimo dijo...

Muy bueno el blog y la iniciativa de rescatar la historia de la música de Misiones y de los Tareferos, que están en la memoria de tanta gente. Felicitaciones Karoso!

Jenny Wasiuk dijo...

ah la Memoria... palabra muy en boga en estos días, pero tomada tan a la ligera y/o como bandera panfletaria muchas veces...
Este blog reivindica el verdadero sentido de la MEMORIA, dando un merecido reconocimiento a aquellos que hicieron tanto por nuestra provincia y su cultura.
Felicitaciones Karoso!!!!
Jenny Wasiuk

Unknown dijo...

Todos los que humildemente cantamos las obras de los autores Misioneros tenemos en nuestro repertorio estas obras...es cantar a nuetra tierra..."Yo soy la Galopa" es la primera galopa de mi primer disco cuando tenìa 15 años ...ya hace varios años atràs... con la direcciòn musical del prof Miguel Viarengo...creo que eso es lo que ha tenido este grupo..cada uno de sus integrantes fueron y son, mùsicos y compositores muy talenntosos, Karoso esta pàgina es importante para nosotros como Misioneros, pero tambien para los que desconocen la mùsica misionera....gracias por el recuerdo ....
Patricia Gaona

Anónimo dijo...

En este "país de fronteras" donde tanta falta hace el fortalecimiento de nuestra identidad, un aporte como éste me hace sentir más misionero, todavía.

Gracias Karoso por el esfuerzo.

Anónimo dijo...

Muy bueno el blog!!!... existe la posibilidad de poder chatear algún día con el genio de Hugo Monzón???!!!

Saludos...

Luis Kosachek dijo...

Agradezco infinitamente y felicito a Karoso por este blog refencial sobre el inolvidable Pepe Novoa y su grupo "Los Tareferos". Me trae recuerdos de infancia y de la escuela. La música de Los Tareferos tiene un color y estilo único que tiene la vitud de trasportarnos automáticamente a una Misiones rural: paisajes, idiosincrasia, personajes auténticos nuestros. Una placentera nostalgia nos produce escuchar esta música y un cariño inefable por aquellos músicos cultores de lo nuestro. Adhiero a las palabras de Karoso sobre que ellos bregaban por lo puramente misionerista. Por ello hay que ponderar a artisticas como el mismo Karoso Zueta, Daniel Stéfani, Tucho González, Ramón Ayala, Vicente Cidade, Raúl Ojeda, Joselo Shuap y otros que siguen firmes con este propósito "misionerista". Y un placer ver el comentario de todos, especialmente el de Patricia Gaona, otra voz referente de ese estilo. Un gran saludo. Luis Kosachek

CARLOS dijo...

Carlos Ramon Viarengo (hijo)
ES MUY GRATO LEER SUS PARRAFOS Y SOBRE TODO,LOGICAMENTE,EL REFERENTE A MI PADRE QUERIDO, MUCHAS GRACIAS, SOLO HACE FALTA ARREGLAR UN DETALLE DEL FINAL, MI PADRE QUERIDO SE FUE EL 16/09/2004 (14.15hs.), DESDE YA QUEDO MUY AGRADECIDO POR TODO, SALUDO DON KAROSO.

Karoso Zuetta dijo...

Gracias por la corrección, Ramón.